Trotta: «No hay una puja con Ciudad por el retorno a clases, son miradas distintas»
El ministro de Educación, Nicolás Trotta, afirmó que «no hay una puja con la Ciudad» por el retorno a clases y que son «miradas distintas» aunque aseguró que con el gobierno porteño «es la única jurisdicción con la que tuvimos una discrepancia» y señaló que «tenemos 6500 computadoras listas para ser entregadas a la Ciudad, esperamos la autorización».
El titular de la cartera educativa dijo a Télam que esperará la reunión que mantengan los ministros de Salud de la Nación y de la Ciudad para avanzar o no en esta nueva propuesta y que «de ser positiva, luego tendremos que ver lo pedagógico».
La Ciudad realizó una presentación informal al Ministerio de Educación de la Nación para que 6.500 estudiantes tengan clases en espacios públicos como parques o plazas y otra cantidad que serían unos 24.000, tengan clases presenciales en la calle y en la vereda de las escuelas tanto públicas como privadas.
«La presentación todavía no ingresó de manera formal pero hay que reforzar las instancias de diálogo. Hemos planificado una reunión para el lunes con Ginés González García y con Fernán Quiros, ya que más allá de la perspectiva epidemiológica tiene que haber una mirada común», aseguró el ministro Trotta.
Y agregó que tras esa reunión «tendremos una mirada más clara» pero le insistimos a la Ciudad que «tenemos listas las 6.500 computadoras y necesitamos que nos nominalicen y georreferencien a los estudiantes para poder cargarles los temas y gestionar la conectividad ante el Enacom».
Manifestó ser «un promotor del regreso a las aulas» pero eso «no lo decido yo», y destacó que con la única jurisdicción que tuvo una discrepancia en torno a la vuelta a las clases fue con la Ciudad de Buenos Aires.
Trotta aseguró que no existe una puja entre Ciudad y Nación por este tema y destacó «toda propuesta educativa puede ser complementaria, distribuir 6500 computadoras no implica ningún conflicto porque significa garantizar un derecho sin poner en riesgo la salud».
Por su parte los gremios docentes rechazaron hoy la propuesta del Gobierno porteño para el regreso a las clases en espacios públicos a partir del 28 de septiembre para que los alumnos retomen el vínculo con sus docentes por considerar que responde a «una actitud anticuarentena» que muestra un «desconocimiento de los procesos educativos».
«Estos anuncios de los funcionarios hablan claramente del desconocimiento de los procesos educativos y de la no asunción de la responsabilidad a la que ha renunciado hace rato (el jefe de Gobierno, Horacio) Rodríguez Larreta», afirmó la secretaria general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-Ctera) en Capital Federal, Angélica Graciano, en declaraciones a Télam.
En el mismo sentido se pronunció la secretaria general de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, quien dijo que se volverá a las clases presenciales en la provincia de Buenos Aires «cuando lo aconsejen las autoridades sanitarias», en el marco de la pandemia por coronavirus. «La prioridad es lo sanitario», remarcó la dirigente sindical.
«La ministra (de Educación de la Ciudad, Soledad Acuña) anunció que van a dar clases en las plazas y equiparó dar clases al aire libre a tomar una cerveza en la vereda de un bar, lo que habla del desconocimiento de los procesos educativos», añadió Graciano.
En tanto, la dirigente bonaerense Mirta Petrocini destacó que se trabaja desde hace meses junto a la Dirección General de Cultura y Educación en protocolos para cuando la situación sanitaria permita el regreso a las aulas.
En esa línea, Manuel Becerra, profesor de historia de la Ciudad de Buenos Aires, magister en historia de la UNSAM , dijo que «salir a comparar las escuelas con los bares ya te marca una postura que no tiene una mirada pedagógica sino de acomodar objetos en el espacio».
«Si se aplican este tipo de iniciativas en este contexto político, geográfico y pandémico sin consensuar con los sindicatos, es más una locura que otra cosa», continuó.
Becerra consideró que «se quiere vender esto como una movida pedagógica innovadora» pero, «así puesto, parece una salida para darle lo que piden a algunos sectores que no son los sindicatos ni las familias».
Desde otra perspectiva, algunos educadores plantearon que es momento de pensar en una alternativa a la educación a distancia para volver a las clases.
«Hay que hacer algo. No solo la ciudad de Buenos Aires sino todas las jurisdicciones tienen que pensar algo y buscar una alternativa», dijo la educadora Guillermina Tiramonti a Télam.
La investigadora del Área de Educación de Flacso consideró que «es necesario salir a buscarlos, conectarlos y, ya que no tienen posibilidades de conectarse por internet, llevarlos a un centro para que puedan recuperar su escolaridad para mantenerlos conectados con la escuela», y consideró que «si se toman los recaudos necesarios, no hay riesgos sanitarios».
Para la directora del modelo educativo Eutopía, Luciana Alonso, la propuesta «es una opción que se suma a las alternativas ya existentes para garantizar continuidad pedagógica».
Alonso comentó a Télam que «la propuesta le otorgaría más autonomía y posibilidades a los directores para pensar otros formatos pedagógicos, según su contexto, en acuerdo con la comunidad educativa».
«Es importante continuar buscando alternativas a las diversas realidades poblacionales de la Ciudad de Buenos Aires», subrayó Alonso.
Coincidió con esta mirada el titular del Centro de Políticas Públicas y especialista en Educación, Gustavo Iaies, quien dijo a Télam que la idea del retorno a la presencialidad «aborda uno de los principales problemas que tiene la cuarentena para la escuela, que es la falta de sociabilización de los chicos y el corte de la relación de los chicos con los adultos de la escuela».
«Ya veremos cuánto más o menos podremos trabajar los contenidos escolares, pero me parece que es una hermosa iniciativa para iniciar el retorno», afirmó.