Cafiero se sumó al repudio de los dichos de ‘Baby’ Etchecopar contra Cristina Kirchner
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, sostuvo que «el odio y la intolerancia son incompatibles con la democracia», al rechazar expresiones del periodista Angel «Baby» Etchecopar contra la vicepresidenta Cristina Kirchner en el programa de televisión «La Mesa de Mirtha», el pasado sábado.
«Todavía se escuchan prejuicios asombrosos contra el peronismo. Hablar de cáncer, en lugar de comenzar una discusión, la clausura», dijo Cafiero a través de su cuenta de Twitter.
Para el Jefe de Gabinete, «el odio y la intolerancia son incompatibles con la democracia» y se tra de «violencia política, es violencia machista».
Ayer, diputadas y senadoras nacionales del Frente de Todos (FdT) presentaron una denuncia ante la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual contra Etchecopar, quien se refirió a la ex presidenta como «el cáncer de la Argentina» y opinó que «mientras Cristina Kirchner ‘moje’ en política, no va a haber paz nacional».
Para los firmantes de la presentación, «Etchecopar utiliza un mensaje estereotipado y discriminatorio, que reproduce la desigualdad en las relaciones de género y busca naturalizar un rol de subordinación de la mujer en la sociedad».
«Más aún -añadieron- presupone que una mujer está ‘sola’ si no tiene un hombre que la acompañe, asociando esta ausencia con algo negativo que necesita ser completado, reparado», sostuvieron las legisladoras.
También Vilma Ibarra, secretaria Legal y Técnica de la Presidencia, sumó su rechazo a través de Twitter: «Las expresiones de Baby Etchecopar respecto de Cristina Fernández, vicepresidenta constitucional del país, son de una violencia agraviante para la convivencia democrática. Y es muy preocupante que las otras personas de la mesa toleraran semejante destrato», indicó.
En tanto, desde la oposición, el diputado bonaerense de Juntos por el Cambio Daniel Lipovetzky rechazó ayer a través de la red social los dichos de Etchecopar al considerar que «jamás el camino es la descalificación ni mucho menos una comparación con el cáncer» y llamó a «ser responsables con las palabras para no fomentar el odio».