Vuoto: “Más temprano que tarde nuestro pabellón ondeará en las Islas Malvinas”

En el acto central por los “40 años de la Gesta de Malvinas”, con la presencia de Veteranos y Veteranas de la ciudad, sus familias, Herederos de Malvinas, vecinos y vecinas, las autoridades nacionales provinciales y municipales de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial e integrantes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad rindieron homenaje en el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra en Ushuaia.

El Intendente Walter Vuoto reafirmó que “Ushuaia es la capital de Malvinas” y agradeció la presencia de representantes de todo el país y de distinta representación política- “Es un gran gesto que estén aquí hoy, porque para los ushuaienses y fueguinos son gestos que nos permiten mirar para adelante, de esta patria extensa y profunda y sentirnos más acompañados”, dijo en su discurso.

La ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, y el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, participaron de la ceremonia que comenzó a las 11 horas frente al monumento en la plaza Islas Malvinas junto al Gobernador Gustavo Melella y la vicegobernadora Mónica Urquiza, el gobernador de Jujuy Gerardo Morales, el senador nacional Matías Rodríguez, las diputadas Carolina Yutrovic y Rosana Bertone, demás parlamentarios nacionales que se sumaron al izamiento del pabellón nacional, donado en la ceremonia de la Vigilia por la Prefectura Naval.

Acompañaron también el jefe de Gabinete de Ushuaia Omar Becerra, el secretario municipal de Malvinas Daniel Arias, la totalidad del gabinete de la Ciudad, el presidente del Concejo Juan Carlos Pino, la concejala Laura Avila, el concejal Gabriel De la Vega. El presidente del CEMU, Conrado Zamora, entregó al gobernador de la provincia Gustavo Melella el pabellón nacional que flameó en la plaza Islas Malvinas durante todo un año, para ser enviado a la Embajada argentina en Londres, para su custodia.

“Debo decirles a nuestros combatientes que ustedes trascienden su existencia porque nos inspiran. Nos hacen sentir que el patriotismo y los valores inmateriales que construyen una Nación están presentes. Que los bienes intangibles, es decir aquellos que no se ven, son tan o más importantes que los bienes materiales” y agregó, enfáticamente, “decimos entonces, ante nuestros Soldados de Malvinas, que la Soberanía no se mancha, nadie está exceptuado de ello”.

Vuoto aseguró que “no es el desafío de un partido político, ni de un gobierno; es el desafío de nuestro pueblo que reclama derechos que hunden en la historia sus raíces; se nutre con la sangre de nuestro soldados caídos y emerge, como mandato inevitable hacia las generaciones futuras”.

“Debemos tener presente que en los albores de nuestra independencia, nuestras islas fueron colonizadas a partir del desalojo compulsivo de la comunidad malvinense y de sus autoridades. A partir de allí nuestro país ha realizado reclamos y ha recurrido a todos los foros internacionales, particularmente a la Organización de las Naciones Unidas, que ha señalado, sin ambigüedades, que Malvinas es, definitivamente, una situación colonial”, agregó.

“Es claro que nuestra Nación sólo quiere que sea suyo lo que es suyo, lo cual es acompañado por la amplia mayoría de los Estados soberanos del mundo. No nos impulsa el resentimiento por los hechos del pasado.

No queremos pasar facturas por las invasiones inglesas, la Vuelta de Obligado o el bloqueo comercial de la argentina naciente. Tampoco que allá por 1830, 3 años antes de que usurparan nuestras islas, secuestraran de nuestras costas fueguinas cuatro niños de la comunidad originaria para ser llevados como trofeos humillantes de sus aspiraciones imperiales. Somos un pueblo pacífico y respetuoso del derecho que se agravia ante el despliegue militar que realiza el Reino Unido en nuestras islas Malvinas”, dijo Vuoto.

Se preguntó “cómo no agraviarnos si el despliegue de armamento es un amenaza latente que contraviene resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que insta a abstenerse de adoptar «decisiones unilaterales» que alteren la situación”. También marcó como agravio que “depredan las riqueza ictícola poniendo en peligro las especies migratorias; además de otorgar ilegalmente licencias para la explotación del petróleo, o concesionar permisos para la extracción de minerales en el lecho marino”.

Destacó el valor geoestratégico que tienen las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur que representan un enclave estratégico que se ubica en la confluencia de los dos océanos y aseguró que “aferrarse a un mundo imperial y colonialista es mucho más que aferrarse al pasado. Es aferrarse a una forma de dominación basada en la fuerza. Si se tiene poder armamentístico se puede hacer lo que se quiere, pero ello no puede ser eterno. La historia de la humanidad así lo ha demostrado”.

Dirigiéndose a los Combatientes afirmó “debemos estar convencidos que más temprano que tarde nuestro pabellón ondeara en las Islas Malvinas, porque no hay un solo resquicio de verdad que asista a los usurpadores que en un arrebato de violencia colonial, anexaron lo que por derecho es nuestro. Es por eso que imagino a millones de argentinos llevando en sus manos banderas para saludar el regreso de nuestras queridas Islas Malvinas”.

Finalmente, entregó las llaves simbólicas de la ‘cápsula del tiempo’ a integrantes del Centro de Ex Combatientes de Malvinas y junto a las autoridades se acercaron al canal Beagle para arrojar los 649 claveles que recuerdan a quienes dejaron su vida en el conflicto de 1982.